Juliana (Colibrí de Oro)
Cantante,
maestra espiritual, mujer medicina y escritora; reconocida por ser una
de las principales exponentes del nuevo canto chamánico en Colombia, y
por ser la creadora de los Cantos Arquetípicos®. Los Cantos Arquetípicos® son un novedoso sistema de autoconocimiento, enraizado en antiguas
sabidurías ancestrales, el cual se constituye en la primera propuesta
que se está realizando en Bogotá, y en todo el mundo, en torno a la
sistematización del canto como vía para despertar los arquetipos
sagrados que nos conectan con nuestra esencia humana, divina y
multidimensional. Juliana es a su vez la primera autora que ha
desarrollado a profundidad el arquetipo de la pareja sagrada interior,
como un modelo simbólico gracias al cual podemos alcanzar el equilibrio,
la armonía y la unidad amorosa entre la energía femenina y la energía
masculina que habitan en nuestro ser interior. Uno de los principales
aportes de Colibrí de Oro a nuestro tiempo es su creatividad para
renovar el poder espiritual de los cantos chamánicos y la palabra
mitopoética de América Indígena, integrándolos al mundo urbano
contemporáneo en los ámbitos de la expresión musical, la creación
literaria, la consulta terapéutica, la formación personalizada, la
meditación profunda y la conducción de ceremonias sagradas.
Juliana
nació con el don de canalizar la voz del corazón de la Tierra, la voz
del corazón del Cielo y la voz del corazón Humano. Desde niña compone
cantos, poemas y mitos. En su adolescencia descubrió que cantando en
soledad lograba comunicarse con Dios Madre-Padre. A sus 27 años recibió
su nombre espiritual Colibrí de Oro, en medio de una serie de pagamentos
que realizó en las lagunas sagradas de la Sierra Nevada de Santa Marta y
del territorio Mhuysqa. Colibrí de Oro significa “mensajera del amor
divino”, así que a partir de entonces Juliana comprendió muy bien cuál
era su misión de ahí en adelante. En el año 2008 fundó su propio Centro
Holístico desde el cual comparte su ser multidimensional a través de
formaciones, conciertos, terapias, retiros, ceremonias, libros, discos y
oráculos. Su canto chamánico y su palabra mitopoética han guiado a
miles de personas hacia el hallazgo y la consolidación de la salud
integral, la soberanía espiritual, el amor puro y la realización plena
del ser. Su voz es un canal de la Divinidad que trae las voces del
fuego, de la luna, del sol, de los maestros ascendidos, de los
arcángeles, de los cristales, de las plantas sagradas, de los animales
de poder, de las diosas y de los héroes mitológicos
Como
maestra espiritual Colibrí de Oro se centra en contribuir al despertar
de la maestría interior, a través de los trece arquetipos guía que
configuran el Sistema de los Cantos Arquetípicos. Sus enseñanzas se
basan en la reconexión con la voz del yo superior, y en el
reconocimiento del ser multidimensional, andrógino y completo que en
esencia somos. Colibrí lleva más de nueve años ejerciendo su labor de
maestra y guía espiritual, a la fecha son cientos de personas las que se
han formado con ella. Se destaca especialmente por compartir sus
conocimientos a través de procesos personalizados de alto nivel
transformacional en la vida de las personas.
Como
escritora ha publicado cinco libros (La voz de la adolescencia, Entre
mundos hermanos, La Guarida del tiempo, Alguien golpea y
Psicosoluciones), la mayoría de ellos bajo el sello editorial de
reconocidas editoriales como Herder de Barcelona y la Universidad
Externado de Colombia. Publicó su primer libro a los veinte años. Su
libro “Entre mundos hermanos” (2008) encontró una amplia distribución en
toda Latinoamérica y en España, y un importante reconocimiento por su
aporte a la comunicación intercultural. Su más reciente libro, “La voz
de la adolescencia” (2016), resalta por su original idea de integrar el
género de cuento y la sabiduría oracular, constituyéndose en una
propuesta novedosa en el ámbito literario. Juliana ha participado en
diversas antologías latinoamericanas de cuento y poesía.
Como
cantante ha integrado sus estudios de más de quince años en técnica
vocal y música occidental (se ha formado con distintos maestros y en
distintas academias de música occidental) con los conocimientos que
adquirió a lo largo de más de diez años de caminar junto a abuelas y
abuelos indígenas, quienes la formaron en el arte de los cantos
chamánicos de diversas tradiciones de América Indígena (cantos lakota,
mapuche, mhuysqa, ícaros del amazonas, cantos quechua-aymara, cantos
huicholes y nahualt). Sus conciertos se centran en resaltar la belleza
de nuestra esencia chamánica, nativa e intercultural. Actualmente
prepara su álbum musical “Mujer Colibrí”.
Como mujer
medicina, Colibrí de Oro es un ejemplo de la nueva mujer chamán que
despierta en América. Se destaca en este sentido por haber dado a luz a
su propia medicina: los Cantos Arquetípicos, una medicina que nos enseña
a sanarnos a nosotros mismos, a sanar los desequilibrios entre la
energía femenina y masculina al interior de cada corazón humano, a
restablecer la armonía en todas nuestras relaciones, y a servir con
impecabilidad al nuevo amanecer planetario. A través de sus cantos y
sus leyendas, Colibrí ha guiado a miles de personas en sus procesos de
sanación interior y encuentro consigo mismas. Su labor es ayudar a
despertar la medicina que habita al interior de cada ser humano.
Toda la
labor de Juliana Colibrí de Oro, además de ser original, creativa,
novedosa y profundamente intuitiva, también cuenta con una base
científica y académica, gracias en gran parte a que Juliana tuvo una
relación estrecha con la Academia a lo largo de casi diez años. A los
veinte años se graduó como Comunicadora Social-Periodista de la
Universidad Externado de Colombia, destacándose por ganarse la beca a la
mejor alumna de su clase. Entre sus veinticinco y sus veintinueve años
trabajó como docente e investigadora en esta misma Universidad, fundando
allí la línea de investigación en comunicación intercultural. A su
vez, se graduó a los 24 años como realizadora de Cine en la prestigiosa
Escuela Internacional de Cine y Televisión, San Antonio de los Baños, en
Cuba, en donde aprendió a ser una creadora, una artista, un ser que día
y noche crea nueva vida desde las entrañas y con todo el corazón, pero a
la vez con el rigor y el profesionalismo que todo arte verdadero exige.
Aparte de ello también se formó en yoga integral, meditación za zen,
reiki, registros akáshicos, taoísmo, enseñanzas de la Gran Hermandad
Blanca, y oráculos afroamericanos, estudios y maestros que fueron
determinantes a la hora de crear el sistema de Cantos arquetípicos®